Autora del post: Marta Gutiérrez Coronado (Grupo E)
La agenda setting o establecimiento de la agenda es el modo por el que los medios influyen en el conocimiento de la realidad y en la percepción de la misma. Según este modelo, toda la información que recibimos sobre nuestra sociedad la recibimos a través de los medios de comunicación y no por que lo experimentamos personalmente. Hoy en día, lo que queda excluido de los medios es como si no existiese.
La teoría de la agenda setting toma gran importancia en el modelo de las democracias occidentales en los que los medios de comunicación, las grandes compañías y la administración pública, además de mover millones de euros, mueven millones de intereses.
La empresa informativa “vive” gracias a las inversiones que las grandes corporaciones destinan para influir en sus públicos. Esto nos da la clave para entender las reglas de este juego y su relación con el comportamiento del consumidor. Un consumidor expuesto a estímulos “financiados” que orientan y modelan su opinión sobre el entorno. Según los mass-media den más importancia a una noticia o a otra, así lo hará también su público. El poder que tienen los medios es impresionante y pueden cambiar la forma de pensar y de juzgar un mismo hecho, pueden convertir algo malo en algo que el espectador justifique. En pocas palabras, la agenda setting no solo es un instrumento para fijar los contenidos de la realidad, sino que también es un potente instrumento para condicionar la opinión pública.
Un caso reciente que puede aclarar el concepto que explicamos es la alarma de pandemia que saltó a los medios de comunicación en el año 2009 a consecuencia de varios casos de Gripe A en México. Este virus se extendió por todo el planeta y provocó graves hospitalizaciones y muertes, pero las consecuencias que finalmente tuvo la epidemia porcina estuvieron muy lejos de las previsiones que la OMS advertía a los medios de comunicación. En España, los laboratorios Roche Farma situaron miles de cajas de Tamiflú en los lineales de las farmacias y el fármaco se suministró con receta médica financiado por el Ministerio de Sanidad. En pocos días, la alarma sanitaria que generaron los medios de comunicación, provocó que millones de personas desearan este fármaco y harían lo imposible por conseguirlo. Disminuyó el consumo de carne de cerdo, así como la demanda de paquetes vacacionales en México. Otras industrias escucharon las necesidades inmediatas del consumidor y encontraron, en esta situación, una oportunidad. Es el caso de los desinfectantes de manos en seco y de las mascarillas sanitarias. De manera que la demanda de los productos que evitaran a toda costa el contagio del mediático virus en lugares públicos aumentó de manera espectacular durante las semanas que este tema fue protagonista de la agenda.
Tras comprender este concepto cobra sentido el título de este post y ahora me gustaría proponer varias reflexiones sobre este tema: los medios de comunicación satisfacen nuestro derecho constitucional a la información, ¿pero el fin justifica los medios? Y si realmente tenemos acceso a información independiente como los propios medios de comunicación más prestigiosos declaran, ¿por qué el gobierno americano tiene tanto interés en silenciar las filtraciones de Wikileaks?
Bibliografía relacionada
M. Wolf. La investigación de la comunicación de masas
Buenas!!
ResponderEliminarMe ha encantando este tema, me ha parecido realmente interesante, estado buscando información sobre ese termino "Agenda setting" y la idea que existe sobre los medios de comunicación es que estos son TODOPODEROSOS, pueden influir en la manera de pensar de la persona e intentar llevarla a hacia un terreno determinado o hacerle ver una realidad que les conviene a ciertos organismo como gobiernos e instituciones, etc ... me fascina la manera en la que somos manipulados.
Enhorabuena por tu post!!
Hola:
ResponderEliminarEste tema desde luego da mucho que hablar, muy bien tratado Marta, estoy totalmente deacuerdo contigo,sobre la cuestión que propones para la reflexión un NO rotundo,solo sabemos lo que los gobiernos quieren que sepamos, a veces incluso me siento desinformada y no, no está justificado para nada, es mi opinión. Te felicito por tu post.